Implementación de un ERP: las buenas prácticas

La adopción de ERPs para agilizar los procesos comerciales ha crecido significativamente en los últimos años. Esta evolución se acentuará, porque el ERP se irá volviendo más «ágil» al integrar ladrillos de inteligencia empresarial o automatización de la fuerza de ventas y el marketing. La implementación de un ERP es, por lo tanto, esencial para ser más eficiente. Pero el éxito de este proyecto requiere respetar algunas reglas fundamentales.

El ERP (Enterprise Resource Planning) se ha convertido en una herramienta esencial para cualquier empresa que crezca. Al integrar muchas aplicaciones, características y módulos, este sistema de información único le permite tener una visión completa de su empresa, pero también optimizar todos sus procesos. Al estandarizar los procesos y los datos y transformar los datos transaccionales en información útil y procesable, un ERP proporciona una visión global de su negocio y ayuda a optimizar las diversas operaciones.

 

La implementación de un ERP

La implementación tiene como objetivo homogeneizar el sistema de información en su empresa. Pero implementar esta solución única significa ser metódico y seguir buenas prácticas. Es prioritario comenzar teniendo una visión completa de los procesos dentro de su organización y cómo funcionan e interactúan con todas sus actividades. Este paso lo ayudará a identificar las tareas y procesos complejos que el nuevo sistema necesitará para poder simplificar o eliminar.

El segundo paso es priorizar sus procesos y sus datos. Comience con sus necesidades inmediatas y luego aborde sus objetivos estratégicos a largo plazo. Cualquier implementación exitosa de un ERP requiere la transferencia de sus datos del sistema antiguo al nuevo. La mayoría de las organizaciones retrasan la migración de datos hasta el final del proceso de implementación, lo que puede tener un impacto negativo en el cronograma de implementación. Cuanto antes comience este proceso, más tiempo tendrá para probar los datos. Este paso también debería ser una oportunidad para preguntar si su equipo de proyecto depende de un cronograma detallado para organizar la migración de datos. ¿Está este equipo abierto a cambios en los procesos comerciales?

 

Tranquilice a los empleados

Esta cuestión confirma que la capacidad de los empleados para adaptarse es primordial en el éxito de este proyecto. Un ERP afecta el trabajo diario de los empleados de diferentes sectores (compras, gestión de ventas, contabilidad, producción, cadena de suministro) que se supone que usan este nuevo sistema. No espere que todos integren y dominen de inmediato esta herramienta. Los bloqueos, basados ​​en causas reales o supuestas, ciertamente aparecerán. Acompañar a los empleados es clave en este paso.

La tercera regla clave es invertir en capacitar a sus empleados. Tendrá dos propósitos: explicar los principios y propósitos de dicha herramienta, y luego asegurarles de sus propias habilidades para usar esta solución. El período de adaptación será más largo o más corto dependiendo de cada persona. Pero es la clave, ya que se beneficiará de un mejor retorno de la inversión de la herramienta.

 

Multiplique las pruebas

Finalmente, la implementación exitosa de un ERP implica probar todos los aspectos de la solución en cuestión antes de ponerla en funcionamiento. Al crear scripts o modelos de prueba puede validar los diferentes casos de uso existentes y comenzar a trabajar en los ejes de optimización.

 

Christophe Adam, Sage Francia

Fuente: https://www.sage.com/fr-fr/blog/author/christopheadam/